En un contexto en el que cada vez existe menos tiempo para ir a la feria y/o supermercado a abastecernos, se hace cada vez más necesario el lograr que nuestras frutas y verduras se mantengan frescas por más tiempo. Si a lo anterior le sumamos el calentamiento global, la escasez de agua y la imperante necesidad de aprovechar de mejor manera los recursos hídricos de nuestro país, nos encontramos con que resulta además fundamental para el cuidado del medio ambiente el que logremos disminuir nuestros desechos de frutas y verduras.
Teniendo lo anterior en consideración, te explicamos a continuación los principales factores que influyen en la maduración y descomposición de los vegetales, así como también nuestras recomendaciones para controlar cada uno de ellos.
- Etileno: Evita que tus frutas y verduras se vean expuestas al etileno que algunas frutas liberan dentro de tu refrigerador. El etileno es uno de los principales factores responsables de desencadenar el proceso de maduración, por lo que al absorberlo lograrás que tus frutas y verduras conserven sus propiedades por más tiempo.
- Temperatura: Procura almacenar tus frutas y verduras dentro del refrigerador, a una temperatura cercana a los 10°C. En el caso de los plátanos, no te preocupes si su piel se pone negra: esta es una reacción de la piel al estar en contacto con el frío, sin embargo la fruta misma estará impecable por dentro.
- Humedad: Aquellas frutas y verduras que quieras almacenar lavadas, procura dejarlas en un recipiente en contacto con papel absorbente. Recuerda que las frutas y verduras lavadas tienen por lo general menor vida útil que aquellas que no lo están, por lo que lava sólo las que vayas a consumir relativamente pronto.
De esta manera y controlando los factores antes mencionados, podrás disfrutar de tus frutas y verduras frescas por más tiempo, conservando sus propiedades y reduciendo tus desechos.